“El
lenguaje es la base de todos los conocimientos”
Después de la experiencia
vivida en Literatura española, literatura infantil y educación literaria el
primer cuatrimestre, afrontaba esta nueva asignatura con seguridad. Estaba segura de que iba a trabajar duro pero el
esfuerzo valdría la pena, y así ha sido. Irune guiándonos y motivándonos es el elemento
necesario para trabajar, mejorar y lograr un aprendizaje significativo. Y, por
supuesto, nuestro esfuerzo, nuestras ganas de aprender y aprovechar esta magnífica
oportunidad de aprendizaje.
El
primer bloque trata de algo tan básico como necesario para
el ser humano: la comunicación oral;
instrumento para comunicar sentimientos, emociones, estados de ánimo, para
obtener y ofrecer información.
La primera parte del bloque
me ha servido para refrescar conocimientos sobre desarrollo comunicativo y
lingüístico. He de reconocer que la segunda parte del bloque me resultó más
compleja a la hora de desarrollar la actividad de conversación en un aula de Primaria,
llegando a la conclusión que muy pocos de nosotros sabíamos desarrollar la
expresión oral en grupo. Para lograr este objetivo, he tenido que “desaprender”
para después volver a aprender.
No se me olvida lo que más
me costó: las preguntas de andamiaje. Son preguntas que favorecen un diálogo
libre y un intercambio de opiniones basado en creencias que puedan compartirse
y rebatirse. Estamos más acostumbrados a los monólogos, en los cuales cada uno
de nosotros contamos nuestra experiencia y no hay intención comunicativa.
En cuanto al bloque 2, la lectura, es indiscutible
el papel fundamental que tiene la lectura en la educación. Después de trabajar
este bloque hemos reflexionado sobre las prácticas que se llevan a cabo en el
aula: el abuso de la lectura en voz alta, las selecciones de fragmentos de
lectura, la elección de libros obligatorios. La gran revelación ha sido la concepción
de la lectura en voz alta como un acto de expresión oral complicado, más que
como un actor lector, y como tal ha de preparase, siguiendo el proceso
adecuado.
Destacar la importancia del
desarrollo de habilidades y microhabilidades para aumentar la fluidez y con
ello favorecer la comprensión lectora. Así como el valor de plantear diferentes
tipos de actividades de memoria a corto plazo, atención, habilidad visual,
fluidez, anticipación ocular, comprensión global. También me gustaría resaltar el
provecho de las rúbricas de evaluación con el objetivo de corregir posibles errores
y reafirmar los aciertos, y sobre todo, dar un feedback positivo y motivador a
los alumnos.
Todo ello, ha sido un
descubrimiento sorprendente, que ridiculiza algunas de las prácticas
pedagógicas sobre la lectura que se llevan a cabo hoy día en algunas escuelas.
En lo que respecta a la escritura, antes de trabajar el bloque 3 me daba la impresión que
actividades como la copia no tendría gran consideración en los últimos cursos
de Primaria, pero no es así. Me ha parecido muy útil y práctica la idea de
transmitir a los alumnos que copiar no es un castigo, que tener “buen letra” es
tener buena imagen. Dar a elegir a los alumnos más mayores tipos de letras y
que la hagan suya, siempre legible y clara. Las propuestas de escritura
espontánea deben responder siempre a criterios de funcionalidad real y
significatividad. También que los maestros mediadores debemos poner a los
alumnos en situación de leer sus escritos. Destacar la trascendencia de los
aspectos que inciden en el desarrollo de la grafomotricidad como la postura y
hábitos, la presión, etc. Se vuelve a mencionar otro hallazgo importante de
este curso, la mal llamada “redacción”, queda claro que debemos utilizar
términos más técnicos y concretos como cuentos, narraciones, descripciones,
argumentaciones, etc. Mencionar la fantástica guía que ofrece el profesor Daniel
Cassany, que en la actualidad no se llevan a cabo en algunas aulas de Primaria:
escribir en clase, cooperación en las tareas de escritura, hablar de lo que
escribe con compañeros y el maestro, etc. La verdad es que al leer esta guía es
todo muy básico, lo que se dice es lógico, natural, no se trata de prácticas
complicadas ni forzadas.
En este bloque hay un
apartado, el resumen, que es esencial en la vida de cualquier estudiante.
Aprender a escribir resúmenes es fundamental y es en Primaria cuando los
alumnos deben aprender a resaltar ideas más importantes, describir brevemente
elementos de un cuento y determinar la información más relevante a la hora de
estudiar.
En cuanto al bloque 4, ortografía y semántica, el
primer error que he desterrado ha sido el uso del dictado como actividad
formativa, ya que se trata simplemente de una actividad evaluativa. Como
menciona Koldo Ramírez López en su artículo, los dictados que se muestran a los
alumnos suelen ser textos absurdos que giran en torno a la abundancia de
palabra de una regla ortográfica concreta, carente de sentido y como
consecuencia no despiertan ningún interés ni motivación en los alumnos.
En este bloque he
descubierto cómo hacer este tipo de actividad en el aula dándole sentido,
provecho, utilidad, sin convertir el medio en un fin, haciendo uso del
atractivo catálogo de variedades de dictados. Además de las múltiples
actividades lúdico-didácticas para el desarrollo de la ortografía.
Lo mismo sucede con la
semántica. Otro gran hallazgo son los numerosos recursos para su
interiorización, unos más funcionales, otros más significativos y algunos más motivadores.
No obstante, además de
conocer estos amplios y diversos catálogos de actividades, como maestros
debemos tener en cuenta que el alumno imita al maestro en todo, por lo que un
cuidado vocabulario y el apropiado empleo del mismo es el recurso didáctico más
eficaz para el aprendizaje del alumno.